El Vaticano despide al Papa Francisco en un funeral solemne de alcance global y coste contenido

La Plaza de San Pedro acoge el funeral del Papa Francisco, en un acto cargado de simbolismo y recogimiento que congrega a miles de fieles y delegaciones oficiales de todo el mundo. La ceremonia, sencilla pero profundamente emotiva, sigue la voluntad expresada en vida por el propio pontífice de evitar ostentaciones innecesarias, una decisión que también se refleja en el coste estimado del evento.

Según fuentes vaticanas y expertos en protocolo papal, el coste total del funeral, el sepelio y los actos logísticos y de seguridad oscilaría entre 2 y 4 millones de euros, muy por debajo de los grandes funerales históricos como el de San Juan Pablo II en 2005, que ajustado a la inflación superaría los 10 millones de euros.

Un funeral marcado por la sencillez y el respeto

A diferencia de funerales anteriores, Francisco ha querido que su despedida sea humilde: el ataúd es de ciprés sencillo, se ha eliminado la tradicional triple caja, y los ornamentos litúrgicos son austeros. La ceremonia, presidida por el decano del Colegio Cardenalicio, se desarrolla en la explanada de la Basílica de San Pedro ante una multitud que, según estimaciones preliminares, supera las 150.000 personas.

El entierro se formaliza en las grutas vaticanas, cerca de las tumbas de sus predecesores, siguiendo la tradición secular de la Iglesia.

Costes desglosados: seguridad, logística y cobertura mediática

Aunque el Papa Francisco solicitó expresamente reducir los gastos superfluos, la magnitud del evento exige un operativo técnico y de seguridad considerable:

• Seguridad: El despliegue de fuerzas de seguridad, incluyendo la Policía Vaticana, el Ejército Italiano y cuerpos especiales de seguridad privada, supone uno de los capítulos más costosos, estimado entre 1,5 y 2 millones de euros. El refuerzo aéreo y los sistemas de vigilancia electrónica cubren toda la zona del Vaticano y el centro de Roma.

• Infraestructura y logística: La instalación de gradas, pantallas gigantes, megafonía de alta potencia y zonas de acceso controlado supone un gasto adicional de alrededor de 500.000 euros.

• Eventos litúrgicos: La preparación y celebración de los actos religiosos oficiales, incluyendo la participación de coros, sacerdotes y maestros de ceremonias, representa un coste de entre 200.000 y 300.000 euros.

• Cobertura mediática internacional: La Santa Sede ha coordinado una señal televisiva global en alta definición, transmitida a más de 140 países, con costes aproximados de 200.000 euros.

• Protocolos diplomáticos: Más de 50 jefes de Estado y 300 delegaciones oficiales han asistido al funeral, con organización protocolaria y asistencia logística coordinadas por el Estado Vaticano, aunque los costes directos de transporte y hospedaje corren a cargo de las delegaciones respectivas.

Un adiós que refleja una vida de humildad

Francisco, el primer Papa latinoamericano y un referente mundial por su apuesta por una Iglesia más cercana a los pobres y a los marginados, ha querido que su despedida sea coherente con su papado: humilde, accesible y centrada en lo espiritual.

El portavoz de la Santa Sede ha recordado que «la celebración de este funeral es el último acto de servicio de Francisco, quien nos enseñó que la grandeza está en la simplicidad y en el amor al prójimo».

Costes históricos en perspectiva

En comparación, el funeral de San Juan Pablo II movilizó cerca de 7 millones de euros en 2005 (alrededor de 10–11 millones de euros actuales) y el de Benedicto XVI en 2023 tuvo un coste moderado, estimado entre 600.000 y 1,5 millones de euros. Francisco, por tanto, se sitúa en un punto intermedio, aunque claramente más cercano al modelo sobrio de su predecesor inmediato.

La diferencia de magnitud responde no solo a cuestiones presupuestarias, sino a una decisión consciente del propio pontífice de priorizar el respeto, la oración y el acompañamiento espiritual por encima de cualquier demostración de poder o grandeza terrenal.

Fotografías: OpenAi